Ya hemos hablado sobre los muebles a medida, sus ventajas y los materiales ideales para su fabricación. Ahora te compartimos algunos puntos a tomar en cuenta para el proceso de fabricación de mobiliario a medida.

Diseño y selección de materiales

La fase del diseño está definida por el cliente, por medio de un plano o modelo del mueble; con medidas exactas para encajar a la perfección en el espacio. 

Además del diseño, se eligen los materiales que se emplearán en la fabricación del mueble a medida. Por ejemplo, la madera, el metal, el cristal o metacrilatos (un tipo de sintético). 

Algo importante a tomar en cuenta es sugerir al cliente el tipo de material idóneo para el mobiliario a fabricar; atendiendo al acabado que desean y el coste de fabricación de los elementos del proyecto.

Fabricación del mueble

Un aspecto importante para que el proceso de fabricación de mobiliario sea el mejor es que la fábrica tenga una buena disposición para agilizar las tareas. Por ejemplo, que las materias entren por un lado y los muebles terminados salgan por otro hacia el almacén. Puedes consultar la nota “Claves para mejorar el control de tu producción”, donde encontrarás puntos claves que pueden serte de utilidad para esta parte.

Preparación de materiales

Es indispensable disponer de los materiales necesarios para cada proyecto, importante para poder cumplir con los plazos de entrega acordados. Considerar también el tema de la escasez de las materias primas, como la madera. 

Una sugerencia es tener un buen stock de los materiales más demandados para la fabricación de mobiliario. Esto ayudará a poder aceptar encargos de gran volumen con plazos de entrega ajustados, sin afectar al cliente. 

Los materiales necesarios se dejan listos para la fabricación atendiendo a cada pieza que conforma el mueble por separado. Cortar y dar forma al material, soldar el metal o moldear, en caso de que se trate de un material sintético. 

Otra recomendación es fabricar todas las piezas a la vez de cada elemento para no retrasar la cadena de producción y poder avanzar al siguiente paso.

Ensamblaje y acabado

En este punto se hace la unión de las diferentes partes del mueble, haciendo uso de técnicas como clavado, encolado, atornillado o soldadura. 

El acabado también es una parte importante del proceso de fabricación del mueble, aquí se aplican tratamientos superficiales para mejorar la apariencia y durabilidad del mueble a medida. Esto puede incluir la aplicación de pintura, barniz, aceite o la colocación de tapicería así como cojines. 

Una sugerencia es tener en la fábrica de muebles una zona específica para esta tarea, lo mejor es que esté ubicada cerca de un punto de carga techado. De esta manera, se facilita el traslado a los almacenes. También debe estar cerca de las oficinas para facilitar al cliente que pueda visitar la fábrica para hacer un control de calidad y dar el visto bueno antes de la entrega final.

Entrega: embalaje, envío y montaje

Finalmente, el mueble a medida se embala para poder transportarlo al lugar indicado por el cliente. Cuando el envío se realiza a otro país, es necesario certificar que ha sido fumigado para prevenir la expansión de plagas. Tomar en cuenta que esto lleva un proceso burocrático que se debe prever no fallar en el tiempo de entrega que se había contemplado en un principio. 

Después, el mueble debe ser transportado a través de una flota de camiones; en ocasiones, es necesario montarlo directamente en el punto de venta.

Ahora que conoces el camino para la fabricación de muebles a medida, síguelo al pie de la letra para que no haya ningún problema y puedas superar las expectativas del cliente y brindar un excelente servicio junto con un mueble de calidad.

Vía Martín